jueves, 6 de marzo de 2014

IV Festival Grito de Mujer

Concienciada como lo estoy con la grave problemática de la Violencia de Género, ya había participado en el Grito II en Madrid e intentado organizar el Grito III en San Pedro del Pinatar con escaso éxito, así que cuando me enteré que se había organizado el Grito IV en Molina de Segura no dudé en apuntarme. Se celebró el Martes 4 de marzo a las 17:30 en la sala de exposiciones El Jardín. Y gritamos, sí, por todas aquellas a las que se les ha arrebatado la voz.

Irel Faustina Bermejo y Francisco Javier Illán Vivas
Reportaje fotográfico en Acantilados de Papel.

Antonio Palazón Cascales


Mariangeles Ibernón Valero

Cristián Mínguez 


Jose Martinez Gimenez


Gema Bocardo Clavijo


José María López Conesa


 Irel Faustina Bermejo

En el lugar en el que gritamos había una exposición de pintura muy interesante de Antonio Tapia titulada Guardianes de Sueños. 60 acrílicos con juguetes como playmobil, madelmans, vaqueros, piratas o soldados, que pretendían mostrar el desarrollo de un sueño en sus distintas fases. Los juguetes  salían de la infancia del espectador y cobraban vida en un mundo realista algunas veces, onírico en otras. La Revista Campus Digital dijo de ellos "los Guardianes de sueños no son juguetes, son amuletos protectores ante la pérdida de la inocencia, son recuerdos amables que dulcifican la realidad."

Pretoriano Ramos Serón

Al ver a Pretoriano Ramos Serón cantando cerca del cartel que anunciaba la exposición pensé que todos deberíamos ser eso, Guardianes de sueños: de los de ellas, de los de millones de mujeres que sufren violencia en el mundo por el simple hecho de ser mujeres: la condena de las viudas de la India, las violaciones de guerra, la explotación sexual, el aplastamiento de los pechos, las violaciones en el Congo , los asesinatos y violaciones en Juarez. Debemos ser sus guardianes, sus defensores, los que exijan que el dolor acabe, los que, como un poema de Jose María López, alcemos la voz con un grito que sea trompeta que retumbe hasta que el suyo y el de sus hijos cese.

Guardianes de la  inocencia. Antonio Tapia

(...)Ven con nosotros, mujer
une tu voz a los poetas
que nuestros gritos después
sonarán como trompetas.
Y saldrás de ese infierno
para vivir en la gloria.
En ese malvado averno
comenzará él otra historia.

Jose María López Conesa